Una chica de compañía MILF que sea, además, una leona del sexo, es sin duda la compañía ideal para aliviar toda la sobrecarga que se lleve en los testículos. Nadie mejor que una mujer de este tipo para dejarlos bien ordeñados y exprimidos. Nadie mejor que una mujer así para dejar en la memoria un recuerdo imborrable.
Pero... ¿de qué hablamos exactamente cuando usamos el acrónimo MILF? Cuando decimos MILF no estamos diciendo otra cosa que Mother I’d Like to Fuck you, o, lo que traducido de la lengua de Shakespeare, viene a ser “mamá, yo quisiera follarte”. Más claro, el agua. La MILF, así, es esa mujer que tiene edad suficiente para ser madre y que, lógicamente, no es la nuestra. Aunque la nuestra, quién sabe, también puede ser una MILF para los demás. Lo cierto es que mejor no abismarse en esos pensamientos para no acabar como Edipo, un poco con la cabeza del revés.
La MILF es una mujer que es madre, que anda entre los 40 y los 55 y que, a pesar de las huellas que la edad y los partos pueden dejar en el cuerpo, sigue siendo atractiva y, lo que es mucho más importante, absolutamente deseable sexualmente. Acercarse a la puerta de un colegio de primaria o secundaria es una buena manera de descubrir unas cuantas MILF. Pero follarse a una MILF que, además de serlo y de estar buena a rabiar, es la madre del amiguito de clase de nuestro hijo o hija no siempre es una buena idea. Historias de ésas, comentan, acaban en divorcios o, cuanto menos, en rollos mentales que acaban amargando la vida del hombre más tranquilo.
Lo mejor, si se desea vivir una experiencia sexual tan intensa como inolvidable con una MILF, es buscar en GirlsMadrid una escort madura, deseable y atractiva. Las escorts MILF de Girls Madrid no solo ofrecen esa excitante combinación de experiencia y lascivia, de sabiduría y vicio, de saber hacer y energía. Las señoritas de compañía maduritas de nuestra web ofrecen, además, la garantía de ser auténticas diosas del placer. Pocas veces se encontrará mejor compañía que la de ellas para llegar a las más altas cumbres del clímax sexual.
Las escorts MILF, además, tienen todo lo que hay que tener, a todos los niveles, para prestar a caballeros mayores una auténtica Girl Friend Experience. Para un caballero de esta edad, poder entrar en un restaurante del brazo de una mujer que pueda pasar por ser su pareja puede ser muy importante. Y, ciertamente, es mucho más fácil que dé el pego en dicho restaurante que la compañía de ese caballero haya sobrepasado la barrera de los cuarenta que si apenas lo ha hecho con la de los veinte. Un guapa, sexy y despampanante chica de veinte entrando en un restaurante del brazo de un señor de sesenta parece llevar colgado del cuello un letrero en el que puede leerse: soy una prostituta de lujo y este señor ha pagado por mi compañía. Por el contrario, si la compañía femenina de ese señor maduro anda entre los cuarenta y los cincuenta, la gente que esté en el restaurante lo mirará un poco con envidia y con mucho respeto. Se intuirán en él virtudes suficientes como para conquistar el corazón de una bella y sensual mujer madura y él, el caballero que haya contratado a esa escort madurita, disfrutará doblemente de su compañía y esperará ansioso el momento de poner la guinda a esa cita disfrutando del placer de follarse a una mamá experta, viciosa y caliente.
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